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El aprendizaje y
las representacione
El trabajo del
formador es a veces poner en relación una
emoción y una representación. Se
trata de considerar el aprendizaje como el pasaje
de una "representación de un saber" a otra
"representación" más compleja o
válida en un campo más
amplio.
No se conoce a
la realidad sino a través de
"representaciones". Cuando uno escucha, tiene
la impresión de oír todo, pero
fisiológicamente se sabe que los
límites de la audición son muy
débiles, no se oyen sino algunas
frecuencias; un perro, por ejemplo, oye otros
sonidos que nosotros. Cuando uno mira, tiene la
impresión de ver todo, pero no ve los rayos
infrarrojos, ni los rayos ultravioletas. Cuando uno
habla de colores, tiene la impresión de ver
esos colores, pero nuestra visión es una
función de las costumbres, del lenguaje; hay
países donde existen sólo tres
palabras para designar a los colores, y en otros
países como en Alaska, ¡existen treinta
palabras para designar a diferentes tonalidades de
blanco! Las palabras intervienen para asir esta
realidad. Lo que vemos en definitiva, no es la
realidad sino solamente una
representación.
La
definición de Edgar Morin
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Edgar
Morin explica lo que es una
representación, diciendo que es:
"una síntesis cognitiva" -
existe entonces un aspecto cognitivo en la
representación - "dotada de las
cualidades de globalidad, coherencia,
constancia, estabilidad."
Pero,
reverso de la medalla, si la
representación es estable,
coherente, es difícil hacerla
cambiar, lo cual explica la dificultad de
todo aprendizaje.
"Ella (la
representación) es obtenida por un
proceso de construcción" - y es la
persona la que construye su propia
representación al interior de
sí misma ya que no viene del
exterior, por ejemplo, del profesor - "A
partir del resultado de la acción
de lo real sobre nuestros sentidos" - la
representación tiene entonces algo
que ver con la realidad - "Pero igualmente
con las adquisiciones de nuestra
memoria".
Se han
hecho experimentos sobre la lectura,
después de haber filmado los ojos
de un lector, uno se da cuenta de que
éste no lee, sino que reconstruye
palabras a partir de indicios percibidos,
de tal forma que, si esos indicios no son
suficientes, hay un error, como cada uno
ha podido experimentarlo; y generalmente
una nueva mirada permite ver que la
reconstrucción ha estado mal hecha.
La comparación de las
sílabas localizadas con
adquisiciones de la memoria es
errada.
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Según
E. Morin, esta reconstrucción
se hace igualmente a partir "de
nuestras fantasías, que nos hacen
privilegiar algunos aspectos más
que otros."
-Es decir que uno va
a retener indicios que otros no ven y a la
inversa. No hay una visión mejor
que otra, pero cada uno privilegia ciertos
indicios.
"Esas
construcciones, enseguida las proyectamos
sobre lo real"
-dicho de otra
manera, esas construcciones, no las vemos
en nosotros, ahí donde son
fabricadas, sino al exterior de nosotros
en la realidad, lo que nos lleva a
confundirlas con la realidad
"cerrando
así un círculo que termina
de ponernos en relación con lo
real."
"Este circulo es
selectivo en el sentido de que una parte
de los datos es eliminada de la
percepción. Es aditivo en el
sentido de que el cerebro completa las
informaciones sensoriales por esquemas de
inteligibilidad y adquisiciones
memorizadas, de tal manera que toda
percepción es un compuesto casi
alucinatorio."
Nuestras
fantasías intervienen en esta
reconstrucción. Un encuentra
ahí la interacción
cognitivo/afectivo encontrada
previamente.
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Esta
interacción interviene entonces, no
solamente como algunos lo piensan, en
fenómenos de motivación o de
interés, sino en la más
mínima representación de la
realidad, es decir que está presente
en cada paso del aprendizaje.
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La
representación entre
sueño-vigilia,
pasado-presente
La
representación está en la
encrucijada de dos ejes: el eje
sueño-vigilia y el eje
pasado-presente:
- el eje
sueño-vigilia: sueño, ya
que cuando uno sueña tiene
representaciones que son restos diurnos
arreglados de otra manera; hay por lo
tanto elementos de la realidad que son
arreglados de nuevo; vigilia, ya que
nuestras representaciones del día
tienen en cuenta también a la
realidad, aún cuando nuestras
fantasías intervienen;
- el eje
pasado-presente: pasado, ya que
nuestros fantasmas dependen de nuestra
historia pasada; presente, ya que los
fenómenos de percepción
intervienen.
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Las
representaciones de una disciplina
Las representaciones de
los saberes
Los saberes no son
contenidos objetivos para transmitir, ya que la
representación que tiene un profesor de un
saber influye sobre su manera de presentarlo; uno
puede hasta decir, de cierta manera, que ya no se
trata del mismo saber. El alumno también se
ha forjado una representación de este saber,
y no es necesariamente la misma que la de su
profesor. Hay entonces confrontaciones de las
representaciones en una clase, confrontaciones que
serán, a veces, al origen del fracaso de
algunos alumnos.
Las
matemáticas como ejemplo
He aquí un
pasaje de entrevista con un alumno de año
terminal científico
(El
bachillerato francés dura 7 años;
terminal es el último, y equivale a nuestro
primer año de Universidad. En los 2
últimos años, los estudiantes siguen
una formación disciplinaria acorde con sus
intereses y habilidades. La línea
científica es una de las más
exigentes y reputadas.):
"J.N.:
¿Qué le aportan las
matemáticas?
E.: Como
decía ahora, me permiten evadirme, me
permiten pensar mucho más, me estructuran un
poco el espíritu, creo que es sobre todo el
rigor que es muy importante ahí, el rigor
matemático, es algo
fundamental.
J.N.: Sí.
¿Por qué? ¿Qué le gusta del
rigor?
E.: El que no haya
sino una solución, es eso o no es eso; es
tal vez esa especie de violencia: uno ve; o si no a
uno lo regañan. Eso es, que no hay
términos medios… Las
matemáticas, son verdaderamente algo puro,
no se pueden desnaturalizar, no puede ser de otra
manera, y el rigor… siempre me ha gustado el
rigor, cuando estaba chiquito, me acuerdo,
pedía que me dieran con el
fuete.
J.N.: ¿Usted
pedía que le dieran con el fuete?
E.: Me acuerdo, un
año en que estaba muy chiquito, debía
tener unos seis años, tal vez un poco
más, me daba cuenta de que no trabajaba; le
había dicho a mis padres: "No logro
trabajar, no hago nada", era en realidad algo
dramático, pero ellos, (como mis resultados
no eran demasiado malos ya que seguía con mi
energía personal, lograba de todas maneras
arreglármelas), y a ellos, no les molestaban
mis notas, que no eran demasiado malas. Pero yo,
sentía verdaderamente que no lograba
trabajar y se los decía, pero ellos, no
hacían nada, entonces yo les pedía:
"Pero en serio, ya que no hago nada,
péguenme con el fuete, no sé, hay que
imponerme el trabajo". Pero ellos no lo
hicieron."
El
deslizamiento de los significantes: rigor
matemático, rigor físico o moral,
lleva a las matemáticas a jugar el rol de
"ley estructuradora" para este alumno. De cierta
manera, las matemáticas representan para
este alumno el rigor que no encontró en sus
padres. Si este alumno encuentra a un profesor que
considere a las matemáticas como "juego", no
estará satisfecho.
Se
encuentra esta misma representación de
las matemáticas como "ley
estructuradora" en algunos profesores. Como
esta representación está en
relación con su personalidad, depende
de sus deseos; uno no se sorprenderá
al saber que son esos profesores quienes son
más rigurosos en sus demostraciones,
los que corrigen los deberes con una escala
precisa, que se preocupan por la
precisión del lenguaje y que buscan,
más que los otros, controlar a su
clase.
He aquí otro pasaje,
esta vez, con un profesor de
matemáticas:
"J.N.: ¿Tiene
usted recuerdos respecto a las
matemáticas?
P.: Muchos; mi vida
está llena de matemáticas desde hace
veinte años. Recuerdos ligados a las
matemáticas, sólo hay eso
(risa).
J.N.:
¿Sólo hay eso?
P.: Toda mi vida
está imbricada, mi vida privada, mi vida
profesional, mis niños, todo está
imbricado. Las matemáticas aparecen por
todos lados, es el tejido de mi vida. Entonces
tengo mucho de donde escoger; no son recuerdos, es
todo, es toda mi vida que es
así.
J.N.: ¿No puede
separar su vida de las
matemáticas?
P.: No, es
imposible, es la trama de fondo.
J.N.: ¿Qué
es una trama para usted?
P.: Es alrededor de
ella que todo está injertado; son las
matemáticas las que orientaron mi
elección en bachillerato de la
sección científica, son las
matemáticas las que me hicieron conocer a mi
marido entre las sillas de la universidad. Si no
hubiera escogido las matemáticas, hubiera
tal vez tenido una vida completamente distinta.
Todos los vínculos que he podido tener, toda
la evolución, todos los eventos que
viví luego estaban ligados a las
matemáticas. Juegan un papel muy grande en
la comunicación entre mi marido y yo. Es la
parte fundamental de mi vida."
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La
representación de las
matemáticas para esta profesora es
la de un "objeto ideal" que le
sirve de sostén en su vida
personal. Como ella, algunos profesores
son particularmente sensibles a "la
belleza" de las matemáticas, que
los maravillan y deslumbran. Son
profesores que aman hacer "teatro" en
clase y que buscan seducir a los alumnos
con la belleza de una
demostración.
Y hay
muchas otras representaciones: las
matemáticas como un mundo
diferente, como objeto malo, como objeto
fóbico, etc.
En
definitiva, los profesores de
matemáticas no enseñan todos
las mismas
matemáticas.
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Las otras
disciplinas
Existen
consideraciones semejantes para las otras
disciplinas: El psicoanalista francés,
Didier Anzieu muestra en su libro, El cuerpo
de la obra, el vínculo que existe entre el
estilo y la persona.
En
historia, se encontrarán
representaciones que hacen intervenir el tiempo, la
manera en que es vivido, los problemas de
genealogía, de origen, de
fin…
En
geografía, las representaciones
están ligadas a la vivencia del espacio, es
decir en última instancia, al esquema
corporal.
En las ciencias
naturales, se encuentran representaciones
ligadas a los problemas con la lengua materna, la
nueva lengua se convierte, por ejemplo, en una
nueva posibilidad en un contexto
difícil.
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